Viena, la maravillosa capital de Austria, se extiende a lo largo de ambos lados del Danubio, conformando una mezcla heterogénea de estilo barroco con un toque de Art Nouveau.
Rodeando la ciudad vieja (o Innere Stadt) se encuentra la notable arquitectura de la Ringstrasse, la avenida principal, con edificios que van desde la encantadora Casa de la Opera hasta el monumental Museo de Historia Natural.
Extendidos por toda la ciudad encontrarás los elegantes edificios de arte modernista de los arquitectos de principio del siglo XX, Otto Wagner y Adolf Loos, testigos silenciosos del florecimiento intelectual y artístico que tuvo lugar en Viena durante esa época.
Por supuesto, los edificios y la historia de la ciudad son sólo un telón de fondo para la cultura cotidiana que todavía se pueden encontrar en las salas de concierto, teatros, óperas y cafés.
Aprender cómo mejorar el rendimiento, el trabajo en equipo y otra serie de valores a través de actividades y experiencias comunes. Esta podría ser una primera forma de ver el Team Building, los incentivos y la formación empresarial.
No obstante, es algo más. Es sobre todo una actividad de aprendizaje a través de la cual podemos ver cómo es la interacción entre los miembros de nuestro equipo, de cara a descubrir sus puntos débiles y sus fortalezas, de modo que podamos solucionar las primeras y optimizar las segundas. En definitiva, convertir el grupo de trabajo en un equipo altamente eficaz.
Austria cuenta con su propia aerolínea con vuelos desde todas las grandes capitales de Europa y EE.UU. directo a Viena e incluso a Salzburgo. Las líneas aereas de bajo coste representan la mejor alternativa actualmente para viajar a Europa del Este. Con SkyEurope puede viajar a la capital austriaca por un precio razonable desde Madrid y desde Barcelona.
Fiesta Nacional: | 26 de octubre |
Área: | 83 871 km² |
Capital: | Viena |
Población: | 8 054 622 |
Hab. Densidad: | 96 hab. /km² |
Idioma: | Alemán (oficial), serbo-croata, húngaro, checo y esloveno. |
Moneda: | Euro |
Para "saborear" Austria, nada mejor que su excelente cocina, su familiar hospitalidad y, cómo no, sus exquisitos dulces que la han dado fama internacional.
El origen de la cocina austríaca está basado en una larga tradición y una mezcla de especialidades europeas.
Platos típicos: „Escalope a la vienesa“(Wiener Schnitzel), el „Tafelspitz“(carne de buey hervida), y la „Trucha a la molinera“(Forelle nach Müllerin Art), el „Kaiserschmarrn“(un plato dulce), los „Palatschinken“(Creps), el „Apfelstrudel“(Pastel de manzana) y la tarta de chocolate „Sacher“son la mejor propaganda de la cocina vienesa.
Existen, además, una serie de especialidades regionales, como por ejemplo los „Salzburger Nockerl“ (soufflé de claras de huevos), o el „Tiroler Gröstl“(patatas con jamón frito) hasta llegar a los más refinados inventos de la Nouvelle Cuisine.
La cocina eslovaca proviene de una región con condiciones climatológicas severas donde por lo menos tres meses del año reina un intenso frío; ésta es una de las razones de la preponderancia de la carne ahumada, patatas, col agria, productos lácteos y harinas, productos que pueden fácilmente perdurar o producirse todo el año sin importar el frío o las nevadas. De la misma manera, los antiguos eslovacos cosechaban la col durante el otoño, la rebanaban, la mezclaban con especias y hacían col agria, una poderosa fuente de vitamina C. La patata cosechada en octubre servía de alimento básico durante el invierno al igual que la leche de vaca fresca o agria. De pescado se consumía sobre todo la carpa.
La gran mayoría de las tiendas están en el casco antiguo; pequeñas calles peatonales, junto a acogedores cafés y encantadores restaurantes, es el entorno ideal para una relajada tarde de compras. Cafés exóticos, chocolates deliciosos, antigüedades y objetos de cristal encabezan los productos más comprados por los turistas en Viena.
Los golosos son los compradores estrella de la ciudad, no creo que se pueda encontrar una selección tan amplia de tiendas de chocolates, cafés, galletas y dulces en general como la que aquí hay. Si lo que desea es hacerle un regalo a los que se quedaron en casa algo auténticamente vienés, la pastelería Sacher: envía sachertorte a cualquier parte del mundo. También hay algunas pastelerías o cafés Konditoreien que tienen el mismo servicio; como Julios Meinl donde no solo podrás comprar sino también degustar en su bar Lukullus.
Las bombonerías son una tentación, no solo el chocolate es finísimo, sino que está combinado con los mejores ingredientes y colocado en cajas de exquisito diseño. Como es el caso de los bombones de la tienda Altmann & Kühne. No deje de probar los famosos bombones Mozart, que los venden en casi cualquier lugar.
Los turistas siempre buscan comprar algo típico del lugar, pues la tienda pro excelencia es Österreichische Werkstätten. Aquí venden la famosa joyería esmaltada, piezas de cerámica, objetos de vidrio soplado y de cristal tallado, velas artesanales, objetos de navidad.